Partículas entre planetas

No me gusta ordenar. Me resulta tediosa esa actividad y admiro a esas personas que para añadir diversión a sus vidas, abren la puerta de un armario o deslizan cajones como quienes desenvuelven regalos a punto de estrenar. Eso sí, cuando he de hacerlo, me meto a conciencia, y como cualquier ritual necesario, despliego todo mi arsenal para endulzar la tarea: …

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Esos pequeños gestos

Todavía no atino a comprender del todo por qué alguien se asombra o se espanta cuando soy amable con un desconocido. Cuando alguien me recrimina que sea «excesivamente» amable o confiada me pregunto qué le hará a esa persona recelar de primeras de otro ser humano. Hombre, una cosa es que vaya a emprender camino con el primero que pasa, …

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Lo que el velo muestra

Me trae loca de asombro esto de los velos religiosos. Ya fueran católicos, ya sean musulmanes. Taparse para no excitar la lujuria de desconocidos… ¿Estamos tontos todos? Esto no se sustenta ni a la primera revisión, pero ya sí que me parece el colmo que occidentales más avezados en derechos y libertades traten de justificar esto en nombre de la …

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Mis toallas de color rosa empolvado

Existen pequeños gestos cotidianos que son dignos de ensalzarlos a los cielos de los grandes éxitos vitales, como la elección de mis toallas. Corrientes, anónimas, de calidad media, de precio asequible, de fácil adquisición, de existencia generalizada, de amplia distribución, de diseño inadvertido… Eso sí, de color rosa empolvado. De un color tipico de toalla, ya muy visto, recurrente, sin …

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Señoras y señores, con ustedes: el miedo

No le he perdido miedo al miedo… todavía me puede, me frena, me saluda, se me burla… No, no le he perdido miedo al dolor, sufrimiento, felicidad, éxito… Pero sí le he restado poder, le he perdido un poco el respeto. Él mismo me ha llevado a esa situación. Si le tuerzo sus planes, lo siento, no haberme encarado tantas …

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El reencuentro

Allí me la encontré. Siempre estaba allí. No se movía más que hacia delante. Y no, moverse hacia delante no es avanzar. Las olas lo hacen constantemente y el mar se contiene en el mismo lugar, se machaca en su inalterable permanencia. Le quería decir a la chica que gritaba contra el viento a la orilla de la playa que …

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