Si te sientes perdido

Si te sientes perdido, no estabas. Si te sientes perdido ¿cuándo dejaste de escucharte? En algún momento desoíste tu voz interior y te pareció que lo que decían de ti era más valioso, más acertado. Nunca fuiste erróneo, siempre atinaste en tu camino para evolucionar. Tropezar es parte del andar.

No existe una meta, un objetivo a alcanzar, un destino al que llegar. Todo eso no es más que quimera del mismo sueño imaginado. No hay un final en el arco iris, es mentira. Despierta, deja de perseguir lo que sea que persigas. No se pasa de pantalla, no hay un lugar al que quedarse. No te espera nada. Solo estás tú en un inmenso océano de abundante vida que te abraza sin parar.

Quizá no te guste lo que haya a tu alrededor, o lo que haya en tu interior. No vas a obtener lo que quieres, lo que anhelas o lo que crees que te falta. Tan solo vas a encontrar lo que has creído y creado. De manera enfocada y coherente, o de manera distorsionada e ignorante. Si esto es una pesadilla dura de enfrentar, eso será. Si es un reto constante para avanzar, eso será.

Pero si te sientes perdido, regresa a ti. Apaga el ruido a tu alrededor y escucha los latidos de vida en tu corazón. La suave brisa de tu respiración. Cierra los ojos y mira en tu infinito interior. Todo junto en perfecta comunión. Llena tus sentidos de momento presente, de ti. No eres ese pensamiento, no lo retengas. No eres tú, es lo que piensas y puedes cambiarlo en cualquier momento. Pero ahora no, porque te vas a volver a perder en tu mente y venimos de ese lugar engañoso que nos extravía. Sigue escuchando sin atrapar el discurso, sin entrar en la razón.

Si quieres encontrarte, deja de anularte. No hay nada grandioso en negarte, apagarte, recriminarte o culparte, es un gran desamor para con la existencia. Si estás en calma y centrado en tu cuerpo, en tus manifestaciones de vida, en tu atenta conexión con lo inexplicable de sentirte en ti, te vas a escuchar, te vas a atender, te vas a priorizar. Has escogido el sitio y momento ideal.

Solo depende de ti estar aquí y ahora contigo. Nada ni nadie puede interferir en esa relación contigo. Lo que experimentas en ese estado es algo que te supera, que está por encima de ti, pero vive en ti. Aunque sea por un instante, lo acabas de hacer. Repítelo, hazlo de nuevo, cuando quieras, cuantas veces quieras. Es un sitio seguro al que acudir. Cierra la puerta a lo externo, ahora estás contigo.

Te sientes perdido porque te anulaste para entregar tu poder afuera. Nadie sabrá jamás lo que es bien para ti. Ni tu madre, ni tu pareja, ni tus amigos, ni la sociedad, ni ningún experto. No existe el maestro, eres tú. Recobra tu poder, sostén tu cetro y tu mando. Ilumina tu camino, y haz de ello tu único destino.

Si te sientes perdido, regresa a ti. Allí dentro, en pleno silencio, sin estímulos de fuera. Tu ser te está esperando, nunca se fue, te aguarda y respeta tus tiempos. No te puede ser arrebatado, te pertenece, te sostiene, te ama. Eres perfecto, no hay un modelo al que seguir. Eres único, no puedes ser juzgado. Eres inmenso, perteneces al todo y el todo a través de ti se expresa. Eres tu universo.

Cuando te sientas perdido, observa tu grandeza. Siempre fuiste inocente, naciste inocente. Si acaso apelas al pasado, no podías haber actuado de otra manera, pues así se hubiera dado. Si acaso imploras al futuro, sé humilde y acepta que no lo controlas. Respira, sé amable contigo y donde el amor a ti y a la vida te lleve, ahí te encuentras.

Desconoces la verdad de las cosas, porque no puedes dejar de verlas bajo tu limitada consciencia. Permítete sorprenderte con los milagros que cada día parecen darse. Agradece estar. Estáte en ti. Y sin perseguir nada, te encontrarás. Todo esto lo sé porque así se me ha dado. No he seguido un método o un estricto manual. He leído de otros y me he visto reflejada. He tenido una conversación y he puesto palabras. He tocado un fondo y he subido. Me he dicho: ya lo he logrado; y he empezado de nuevo.

Así me sucedió hace ya tiempo, me sentí muy muy perdida. No entendía cómo las personas se me acercaban con este problema para que yo les ayudara desde la abogacía, el coaching o la formación. Atraemos lo que somos, y yo estaba perdida y atraía náufragos a mi vida. Orientando a los demás y saliendo de lamerme mis propias heridas para ponerme al servicio de lo que se me presentaba es cómo me fui encontrando poco a poco. Y sigo haciéndolo cada día. Y aún cuando a instantes me siento perdida, confío en el camino. Respiro.

Si te sientes perdido no huyas, está todo en ti. Confía en que las cosas no pueden ser de otra manera, no las fuerces, tan solo sosténlas. Si te sientes perdido, no pasa nada, es parte del camino, recuerda. Si te sientes perdido, actúa, anda, pero sin esperar tu controlado resultado. Si te sientes perdido, te escuchas en tu cuerpo, así que apaga tus miedos y pon foco en los luceros. Mira tus pies, tus manos y tus dedos, como grandes obras te han sido son otorgadas. Confiar no es parar y parar no es fallar.

Si te sientes perdido, estás fuera de ti. En un lugar al que no eres, al cual no perteneces. Si te sientes perdido, rebusca tu brújula, inventa otro mapa. Si te sientes perdido, no luches, volver a tu piel es seguro. Si te sientes perdido, estás de enhorabuena, es un aviso de que estás en el tránsito de encontrarte, porque allí, no es. Si te sientes perdido, respira. Aprende en la incomodidad, no te resistas. Tan solo, respira. Pequeños momentos, conforman una vida.

2 comments

  1. Procuraremos respirar. ¡Respirar o morir!

  2. Laura Segovia

    Respirar lo hacemos, el cómo es la clave. Respirar conscientemente 🙂

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